El Poder Ejecutivo promulgó la Ley 31075 con la que se hace oficial la creación del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, en reemplazo del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri).
La norma publicada en el diario oficial El Peruano da cuenta de las funciones del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, el cual tiene como principal tarea reconocer la importancia de la agricultura familiar, que representa el 97% de las más de 2.2 millones de unidades agropecuarias.
Toda referencia normativa al Ministerio de Agricultura o al Ministerio de Agricultura y Riego debe ser entendida como efectuada al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego.
Asimismo, la ley oficializa la creación del viceministerio de Políticas y Supervisión del Desarrollo Agrario y el viceministerio de Desarrollo de Agricultura Familiar e Infraestructura Agraria y Riego.
El primero de estos se encargará de la formulación de políticas, normas sectoriales, supervisión y evaluación de resultados; en tanto el segundo, tendrá la misión de implementar Políticas Nacionales y la gestión sobre materias específicas, priorizando la agricultura familiar bajo un enfoque de gestión descentralizada e integral del territorio.
Los ámbitos de competencia del ministerio serán las tierras de uso agrícola y de pastoreo, tierras forestales y tierras eriazas con aptitud agraria; la agricultura y ganadería; los recursos forestales y su aprovechamiento sostenible; la flora y fauna silvestre; la sanidad, inocuidad, investigación, extensión, transferencia de tecnología y otros servicios vinculados a la actividad agraria; así como los recursos hídricos, riego, infraestructura de riego y utilización de agua para uso agrario e infraestructura agraria.
Del mismo modo, son funciones del flamante ministerio: formular, planear, dirigir, coordinar, ejecutar, supervisar y evaluar las políticas nacionales bajo su competencia, aplicables a todos los niveles de gobierno; realizar el seguimiento respecto del desempeño y logros de la gestión agraria alcanzados en los niveles nacional, regional y local, así como adoptar las medidas correspondientes; además, de articular con gobiernos regionales y gobiernos locales la implementación de las políticas nacionales bajo su competencia y evaluar su cumplimiento, entre otras tareas.
La aprobación del Reglamento de Organización y Funciones del ministerio se someterá a consideración del Consejo de Ministros en un plazo no mayor de 60 días.
La plataforma de trazabilidad AgTrace anunció la firma de un acuerdo de vinculación
técnica y comercial con la empresa de investigación AgIdea, que permitirá mejorar el
manejo de productos trazados y la evaluación de los Límites Máximos de Residuos (LMR)
que exigen los mercados importadores de alimentos.
El trabajo conjunto con AgIdea, una firma que cuenta con una amplia red de estaciones
experimentales, laboratorios y recursos humanos especializados en agronomía, biología,
biotecnología y química analítica, le permitirá a Agtrace potenciar su servicio.
Cabe recordar que se trata de un software que, a partir de la carga en el sistema de los
diferentes fitosanitarios utilizados en la producción del alimento y del destino comercial a
donde se lo pretende exportar, evalúa los riesgos inherentes a los LMR de determinados
principios activos utilizados en la producción, en función de las diferentes tolerancias, dosis
correctas y tiempos de uso adecuados.
Si el nivel de LMR supera a los permitidos por el país de destino, el programa emite una
alerta que le permite al exportador reorganizar su producción. Del mismo modo, puede
anticiparse y organizar los lotes de productos en función de sus LMR y los destinos a los
que podrían enviarse.
En este caso, AgIdea cuenta con un moderno Laboratorio de Química Analítica
llamado AgIdeaLabs , basado en espectrometría de masas (UHPLC-MsMs), alto nivel de
precisión y estrictos protocolos de calidad.
Esto permite profundizar al detalle el análisis de los residuos de pesticidas que pueden
encontrarse en alimentos, tanto para consumo humano como animal, en el marco de un
contexto global que demanda cada vez más información de este tipo.
OBJETIVOS
Por ello, el acuerdo entre AgTrace y AgIdea apunta a ofrecer a la comunidad de
productores y exportadores de alimentos de alto valor, un soporte único para el manejo de
la trazabilidad, basado en cuatro etapas: toma de datos, muestreo y logística de muestras,
análisis de muestras y toma decisiones.
“Todas las fases son integradas en un software de diseño ad-hoc (web.agtrace-food.com)
basado en la agrupación inteligente de manejos, los límites actualizados de presencia de
trazas de los principales mercados destino, un sistema de alarmas anticipatorio, y la
certificación de libre uso de los lotes de producción para presentación a los clientes
finales”, explicó Adrián Poletti, CEO y fundador de AgTrace.
“Vemos un enorme potencial de sumarnos a la plataforma de AgTrace con nuestras
capacidades analíticas. Nuestro laboratorio central en Pergamino, Bs As, y los equipos
técnicos situados en las principales zonas productivas del país representan un valor
agregado para las cadenas productivas que exportan productos de calidad a mercados
cada vez más exigentes”, comentó Gonzalo Grigera, CEO y fundador de AgIdea.
Entre otros beneficios, Poletti enumeró : la trazabilidad simplificada por agrupación de lotes
de acuerdo al análisis de riesgo, la mejora en la eficiencia de los procesos por capacidad
de anticipación a situaciones riesgosas, la evaluación integral de procesos (manejo,
variedad,) y resultados de análisis de laboratorio, la confianza en la carga de información
centralizada para la toma de decisiones de logística y venta, y la experiencia en el manejo
a campo y planta de las producciones de especialidades.
El inicio de la campaña de ajo en Perú, que arrancó este mes y se prolongará hasta abril de 2021, ya arroja resultados positivos. Hasta la primera quincena de
octubre, las exportaciones aumentaron un 86% respecto del mismo periodo de 2019, totalizando 874 toneladas.
Este crecimiento fue impulsado principalmente por los envíos a México (segundo destino más importante en 2019, con un 32% de participación), hacia donde se
exportaron 853 toneladas. Este mercado incrementó su demanda en el último mes,lo que se vio reflejado en el crecimiento de sus importaciones en un 15%.
México es un país productor y exportador de ajo, cuya campaña va de abril a septiembre, complementaria a la peruana, que le provee en sus meses de
escasez.
Este año, Perú tiene grandes oportunidades de crecimiento en Estados Unidos (tercer destino más importante en 2019, con un 9% de participación), hacia donde
se exportaron 21 toneladas en las dos primeras semanas de campaña. En 2020, Estados Unidos ha incrementado su demanda de ajo, lo que se vio reflejado en
sus importaciones que crecieron 11% en volumen y 42% en valor entre enero y agosto.
La cebolla es uno de los alimentos cuyo uso en la cocina peruana es fundamental. La preparación de cualquier plato peruano siempre tiene esta base: lo que llamamos “aderezo” o “ahogado“. Esta es una mezcla de cebolla, ajo y diferentes ajíes, la base de muchos de nuestros deliciosos platillos.
Sin embargo, algo que siempre caracteriza a cualquier especie de cebolla es su capacidad para provocar lágrimas en todo aquel que se atreva a prepararla o simplemente cortarla. Suele ser muy típica la presencia de esta hortaliza en las ensaladas, desde su forma cruda hasta caramelizada u horneada.
Pero un nuevo tipo de cebolla norteamericana, conocida como Sunion, podría haber logrado acabar con este mal. La razón por la que lloramos al cortar cebolla no es otra que el sulfuro de alilo, un compuesto que se encuentra de forma natural en cualquier variedad de esta hortaliza y que se excreta de la misma al cortar, picar o simplemente partirla.
Este tipo de sulfuro funciona de forma similar al conocido como gas lacrimógeno: generará lágrimas al contactar con la conjuntiva o capa más externa de los ojos, de forma secundaria a la irritación de los mismos.
Realmente, las lágrimas no son más que un mecanismo defensivo y de limpieza, cuyo objetivo final es paliar dicha irritación y "limpiar" las moléculas de sulfuro que han contactado con los globos oculares. Pero evitar que se produzca el proceso es complicado y casi imposible.
Sin embargo, las sunions prometen evitar este molesto lagrimeo que nada tiene que ver con el llanto secundario a emociones intensas como la alegría o la tristeza, ya que podemos asumir que cortar una cebolla no provoca de por sí ninguno de estos sentimientos.
De hecho, la misma empresa promete que su cebolla puede usarse en cualquier tipo de receta, igual que cualquier otra cebolla común, desde su consumo en crudo hasta elaboración de salsas, pasando por su horneado o fritura, o incluso picada para hacer sopa.
En realidad, una sunion es una mezcla de dos cebollas, algo que le otorga un color amarillento. Es su forma de almacenaje lo que evita sus efecto irritante: el tiempo que pasan en el almacén es lo que aumenta su suavidad y dulzura, dado que carecen de la sintetasa de factor lagrimal, el compuesto que colabora en la aparición de lágrimas al cortarla en trozos y rodajas.
Como indica el mismo fabricante, no existe una modificación transgénica para dar lugar a la variedad sunions, sino que hablan de un cruzamiento "totalmente natural". Algo que, al fin y al cabo, es en realidad una modificación genética de las dos especies de cebollas usadas con el paso del tiempo.
Dicho de otro modo, se trata de un cruce que altera la genética, aunque sea de forma más lenta y fuera del laboratorio. Una modificación genética, en definitiva, como las que se han conseguido en casi cualquier verdura, hortaliza y fruta actuales en comparación a los primeros cultivos datados en miles de años atrás. La selección natural hace el resto.
Actualmente este tipo de cebollas solo pueden adquirirse en cadenas de supermercados minoristas de los Estados Unidos, como Kroger, Costco y Walmart, pues las sunions se cultivan solo en Nevada y Washington. Aún así, pueden ser el principio de un mercado prometedor.